Un nuevo libro sobre la guerra civil se presenta hoy en Leon

«En el momento en que el gaitero se disponía a atacar otro pasodoble, un grupo de personas penetró en el bar profiriendo vivas al fascio y mueras al partido comunista y Largo Caballero, mientras extendían sus brazos imitando el saludo fascista.

Se trataba de Etelvina Riera, la maestra del pueblo, que iba acompañada de su hermana y dos o tres jóvenes de la localidad. Pronto, algunos mozos de Villar y de otros pueblos hicieron frente a los alborotadores».

El incidente no pasó a mayores pero la romería terminó antes de tiempo. Un presagio de los oscuros tiempos que estaban por venir. Era Villar de Vildas, concejo de Somiedo, 17 de junio de 1936. Hoy, el autor asturiano José Luis Alonso Marchante presenta en la librería Artemis de la capital leonesa su libro Muerte en Somiedo. Una historia de la guerra civil en Asturias y León (ed. Azucel), volumen que recuerda, recrea, ordena, investiga y pone en letras de molde los sucesos vividos durante la contienda en ese rincón del Principado y también en las comarcas vecinas leonesas (sobre todo Babia y Laciana).

En estos años marcados editorialmente por la proliferación de obras que pugnan por ofrecer la visión más completa, general y global de la lucha fratricida, Alonso Marchante acerca su lupa a un territorio que conoce bien por tener en él sus raíces; y así, con nombres y apellidos, bien pegado al terreno, describe cómo se vivió la guerra en un rincón de España. Comenta el autor que anteriormente «no existía nada específico sobre la zona», y aunque en un principio sopesó la posibilidad de estructurar todo el material obtenido en forma de tesis doctoral, finalmente decidió publicarlo como libro.

El resultado es una gran cantidad de datos en la que se revela el día a día de aquellos años, con las represalias ejercidas, además, «desde los dos bandos». No olvidemos que Somiedo y toda Asturias era territorio republicano pero estuvo pronto en contacto con el fuego franquista que intentaba penetrar desde los altos valles leoneses. Con ayuda de numerosísima documentación y no menos significativas anécdotas, José Luis Alonso consigue dibujar el mapa bélico y humano de la región asturleonesa occidental en aquel tiempo.

Y con respecto a la percepción actual del tema, considera que hoy, setenta años después, bien puede tratarse «con perspectiva y sin apasionamiento» y hacerse leyes en pro de la memoria histórica, como la actualmente en marcha, la cual considera un acierto para paliar lo que durante muchos años fue una situación «injusta», sobre todo por la «imposibilidad de defender el honor del familiar asesinado», asegura el autor.

Fuente: Diario de León