Uno de cada cinco leoneses no tiene para vivir

Cáritas Diocesana de León anunció ayer durante la presentación de la memoria de 2006 que uno de cada cinco leoneses viven por debajo del umbral de pobreza tras el último estudio realizado por la Fundación Foesa.
Esta cifra refleja que el 20 por ciento de los ciudadanos de León vive con menos de 600 euros al mes, cantidad que corresponde con el salario base. Este estudio muestra un incremento de 2,25 puntos desde el anteriormente realizado en 1998.

Estos datos corresponden a la pobreza más conocida por los ciudadanos, la económica. Aunque desde Cáritas anuncian que la mayor carencia que vive León es la soledad de la gente mayor. El responsable de análisis de programas de Cáritas de León, Vicente Guillán, apuntó que «la capital leonesa es la ciudad más vieja de Europa». Además, también existe mucho reclamo a nivel migratorio porque «es una ciudad que no ha tratado mal a los inmigrantes y que administrativamente es la que más ágilmente resuelve el papeleo» y añadió Guillán que cuando llegan «trabajan en el sector servicios y en la construcción porque en León apenas hay industria». Cáritas atendió el pasado año a 816 personas, de diferentes nacionalidades, por primera vez, de los que casi el 19 por ciento eran indocumentados.

La llegada de inmigrantes ha generado la existencia de pisos patera donde se acumula mucha gente llegando a reunirse más de siete personas en pisos pequeños o los pisos dormitorios en los que, por ejemplo, en Villaobispo en una ocasión se encontró un piso en el que dormían hasta 32 personas divididas en turnos de ocho horas y por el que el propietario recibía 100 euros de cada inquilino al mes, según explicaron desde Cáritas de León.

Entre las nuevas pobrezas se espera que, en el año 2010, la infancia se coloque en la cumbre. El generador de este tipo de carencia se estima que se deberá a la desatención producida por parte de los padres y madres que tienen que trabajar fuera de casa y al crecimiento de las unidades monoparentales. Este hecho repercute en otros factores como el fracaso escolar que en «Castilla y León es del 16 por ciento», afirmó Vicente Guillán.

Cáritas Diocesana de León explicó que no cubren a las personas que ya están cubiertas por alguna institución, la labor se centra en «la gente excluida o en peligro de exclusión». El secretario, Carmelo González, afirmó que Cáritas «no solamente da el pez también da la caña y enseña a pescar».

Para el desarrollo de la labor en León, Cáritas cuenta con 120 voluntarios y ocho miembros de personal técnico. En el año 2006 se realizaron 11.000 intervenciones de atención primaria y 423 ayudas directas. En esta atención se han incluido dos proyectos que cubren las necesidades de ludoteca y apoyo escolar a niños con problemas económicos para que las parroquias después de clase hagan juegos formativos en función de las necesidades que tenga cada uno. Además, se hace un seguimiento familiar para extender la atención a todo los componentes familiares.

En relación a las personas con drogodependencia en Cáritas llevan a cabo un análisis de derivación e intervención familiar, sin hacer tratamiento. El número de casos atendidos en 2006 ascendieron a 128, a los que hay que añadir 48 familias y 15 casos de atención jurídica.

Una iniciativa de carácter único en España es la casa de acogida para internos en el centro penitenciario de Mansilla de las Mulas y que está destinado a aquellos que no tienen donde acudir cuando disponen de permiso para salir. En el 2006 dio cabida a 125 usuarios de los que 62 disfrutaban de su primer permiso.

Fuente: La Crónica de León