La Romeria de San Marcos en Sahagun

Ni un minuto de clemencia para echar un baile, amaneció lloviendo y así se quedó todo el día.

Con cierta dosis de tristeza, los vecinos de la localidad de Sahagún veían ayer, a causa del mal tiempo, como la ancestral romería de San Marcos, la del pan con queso, tenía que ser trasladada al resguardo, bajo los soportales de la Plaza Mayor.

Un cambio de escenario que, a pesar del intento, deslució con mucho de las imágenes que esta tradicional romería suele dejar para el recuerdo cuando se celebra en las campas de la Virgen del Puente. Con decenas de familias comiendo juntas.

En todo caso, cuando hay ganas de fiesta, poco importa donde y como, así que, fieles a la tradición, decenas de vecinos de Sahagún se acercaron ayer hasta el corazón de la villa para echar unas limonadas, machacar unas avellanas y recoger de paso el tradicional bocado que distingue esta fecha, un pan de leña y un pedazo de rico y tierno queso para acompañar.

El celebrar así la romería, en el pueblo y no en la campa de la Virgen, no fue todo despropósito, ya que al ser un día laborable, se dio la oportunidad de disfrutar de un pedacito de la fiesta a los que por su trabajo se quedan sin ella todos los años. Así las cosas, con chaparrón incluido, el Ayuntamiento de Sahagún acabó con las jaulas de panes y de quesos, en total, 1.300 raciones.

Si tradicional es comer este tentempié, más lo es si cabe echar un baile. Los incombustibles dulzaineros fueron los primeros en llegar y los últimos en irse tras haber 'tumbado' al último danzante al ritmo de la conocida Tantárida o Tantáriga. La sintonía de toda fiesta de San Marcos que, tradicionalmente, se interpretaba a lo largo del trayecto que une la localidad con el citado santuario, no más de cuatro kilómetros de ida y otros tantos de vuelta que las mozas y algunos mozos valientes completaban sin descanso.

Tampoco fue posible la bonita procesión de la Virgen del Puente, quien se tuvo que conformar este año con un solemne paseo por el interior de la iglesia. El tiempo por la tarde tampoco dio tregua aunque la Plaza Mayor tuvo ambiente hasta última hora confirmándose así que, aunque San Marcos llenó charcos no consiguió aguar la fiesta a los vecinos de Sahagún.


Fuente: La Crónica de León