Los desprendimientos del tunel de Pola, lleva a que el tráfico de vehículos no pase por Pajares

El Ministerio de Fomento desplazará el tráfico pesado de la carretera Nacional 630 por la autopista que une León con Asturias (AP-66, también conocida como la autopista del Huerna) durante aproximadamente un mes, con motivo de ejecutarse el proyecto de demolición de parte del primer túnel de Pola de Gordón, situado junto al polígono industrial.

Las obras, que han sido demandadas por los vecinos y el propio Ayuntamiento por los constantes desprendimientos de rocas y la alta peligrosidad para la seguridad vial, se llevarán a cabo con toda probabilidad en el mes de octubre, ya que ha sido por otra parte una de las demandas del actual equipo de gobierno para no perjudicar al turismo en el mes de septiembre, fecha inicial dada por la Subdelegación del Gobierno, Francisco Álvarez.

Ésta no es la primera vez que el tráfico es desviado por la autopista. En el año 2001, el ministerio de Álvarez Cascos ejecutó esta medida al realizarse importantes obras en el firme del pueblo de Pajares. En aquel momento tanto el tráfico pesado como los turismos circularon por los pueblos de Olleros y Sorribos de Alba debido a que la entrada de la autopista se encuentra en La Magdalena, a 13 kilómetros de La Robla. Los peajes fueron situados en Sorribos. Como contraprestación tras las obras en el puerto, se proyectaron las dos circunvalaciones que hoy día ya se han ejecutado y que ahora facilitarán este nuevo desvío.

Según los datos que se han ofrecido sobre la densidad de circulación por la Nacional 630, se detalla el que es utilizada diariamente por unos 8.000 vehículos, de los cuales 2.500 son camiones o furgonetas. Por su parte, pese a esta medida, el Ayuntamiento pretende para minimizar los efectos de los trabajos que se realicen cortes intermitentes.

El subdelegado del Gobierno en León, Francisco Álvarez, señaló ayer tras la reunión del consejo de seguridad de Gordón que se celebra periódicamente que los aspectos técnicos y de funcionamiento para la ejecución de las obras «se están determinando aún». «Estudiaremos junto al Ayuntamiento y la Unidad de Carreteras las alternativas que menos perjudiquen lógicamente a los conductores, así como a los vecinos de estos municipios». Para la realización de estas obras ha sido preciso además del lógico proyecto, diligenciar una serie de permisos a varios ministerios, como Economía y Hacienda, para poder autorizar la utilización de la autopista sin coste para los usuarios de la N-630 durante la duración de las obras.

El presupuesto que destinará el departamento que dirige la ministra Magdalena Álvarez es de 4,5 millones de euros. Cuando las obras arranquen, se calcula que los conductores tendrán que acceder por La Robla a la carretera Comarcal 626 en dirección a La Magdalena o desde allí a la N-630 por la circunvalación del pueblo de Olleros de Alba. La Junta de Castilla y León tiene aún pendiente de ejecución el anillo exterior por el pueblo de Llanos de Alba, por lo que los conductores deberán atravesar su casco urbano.

El alcalde de La Robla, Luis García, afirmó que «suponemos que este año o a primeros de 2008 se licite el último tramo de esta comarcal que debe tener una vía rápida de conexión con la autopista como en más de una ocasión se ha comprobado su necesidad».