jueves, 20 de septiembre de 2007

La linea Lada-Velilla pasará por la zona del Bernesga

El Gobierno se decanta por esta opción tres años después de realizar numerosos estudios preliminares. Esta red de alta tensión multiplicará la potencia energética de Asturias que necesita esta infraestructura para exportarla. Pese a que en este proyecto León sufre el daño de esta 'autopista' en más de 90 kilómetros por su suelo, no se recibe nada a cambio y no está prevista compensación alguna a las localidades afectadas. La línea de alta tensión proyectada por la empresa pública Red Eléctrica de España (REE) entre Asturias y Palencia, en concreto Velilla del Río Carrión, atravesará la provincia leonesa entrando por el llamado corredor del Bernesga, a lo largo de 124 kilómetros, la mayor parte de ellos en suelo leonés, y afectando finalmente en mayor o menor medida a 13 municipios de la provincia, por este orden: Villamanín, Pola de Gordón, La Robla, Vegacervera, Matallana de Torío, Santa Colomba de Curueño, La Vecilla, Vegaquemada, La Ercina, Cistierna, Cebanico, Prado de la Guzpeña y Valderrueda.
Sólo un milagro podría hacer variar la elección de trazado de la enésima autopista eléctrica que atravesará la geografía provincial, algunas ya centradas en este mismo o parecido recorrido, precisamente uno de los motivos de más peso para que REE haya abogado por el corredor del Bernesga, el cual, por cierto, no había sido propuesto en un primer momento entre las alternativas a estudiar.

Sin embargo, cabe recordar que esta opción entró en la terna mucho después cuando así lo sugirieron informes tanto del Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (Fapas) como de la Cátedra de Ecología de la Universidad de León.

El trazado ha sido dado a conocer, de refilón y tras ocultarse durante semanas pese a haberse notificado al Ministerio de Industria, en el trámite previo a la Evaluación de Impacto Ambiental, una abundantísima documentación (sólo el informe alcanza 1.500 folios) que ayer fue dada a conocer a municipios asturianos pero no a los leoneses, más que indignados con este trato «inexplicable», sobre todo teniendo en cuenta que la mayor afección (un 70% de los municipios) afecta a suelo leonés.

EL MUNDO / LA CRÓNICA DE LEÓN ha tenido acceso a toda la documentación, de la cual extracta hoy lo más relevante de un proyecto que afectará a 505 kilómetros cuadrados y que, según el estudio de impacto, se ha seleccionado teniendo en cuenta, como dijeran el Fapas y la Cátedra de Ecología, por donde menos impacto causa. Textualmente se defiende que «se han considerado determinantes como condicionante de primer orden los corredores de infraestructuras de grandes carreteras y de otras líneas (de alta tensión) existentes en esta zona», es decir, lo mismo que los municipios del valle de Gordón, enmarcados en el Alto Bernesga, aducían hace apenas una semana cuando medio millar de personas se manifestaron en Pola contra esta autopista eléctrica, recordando que por el Bernesga ya circulan numerosas líneas como para asumir otra de 400.

A grandes rasgos, desde su inicio en una subestación eléctrica que no será Lada sino que se ejecutará nueva en Sama (la línea será Sama-Velilla desde ahora), sigue un trazado descendente al sur que entra en la provincia por la cuenca alta del arroyo de Las Vegas de Villamanín y busca un paralelismo aproximado a las líneas ya existentes Lada-La Robla y La Robla-Velilla, si bien hay varios requiebros, como que por ejemplo en este caso no entra en La Robla sino que apenas coge a este municipio de refilón, como también lo hará con el de Vegacervera, por ejemplo.

No se ha aireado aún el coste que tendrá la ejecución de la línea, porque no corresponde a este trámite, pero si el último cálculo lo cifraba en unos 70 millones está claro que sólo puede subir de esta cuantía, ya que el trazado es con mucho el que más rodeo da, según la evaluación de impacto porque sortea los espacios más conflictivos desde el punto de vista ambiental y económico, entre otros. Sí se valora en el proyecto el coste de estas labores de supervisión ambiental en las futuras obras, que apenas son de 346.000 euros (no llega a 60 millones de pesetas).

Estos densos documentos serán ahora terminados de entregar a los ayuntamientos y mancomunidades afectadas, la Universidad de León y otros organismos directamente implicados, con un mes para plantear sugerencias. Es la anunciada fase de «consultas previas y negociación» siempre aireada. En algunos casos, el mes se les irá en desentrañar tan pormenorizados datos. Incorporadas las sugerencias, se sacará la evaluación de impacto ambiental a información pública oficial, vía boletín, para abrir período de alegaciones, desde ONGs a particulares. Para quemar plazos, y visto que todo está tan avanzado, el impacto ambiental y el proyecto de ejecución irán a la par. Por eso, y porque hay consenso político autonómico y nacional, sólo un milagro evitará que en 2011 la Sama-Velilla cosa la provincia de norte a este.

Fuente: La Crónica de León

No hay comentarios: